Pasé un par de días en Chañar, con Pablo y su familia, y entre otras cosas me tocó hacer un asado. Ya no servía la excusa de ser "gallego". Y bueno, lo hice... y se podía comer!! Sin embargo, había un problema, el camionero que iba a viajar a Bolivia desde este pueblo, todavía no sabía cuando lo iba a hacer y esto ya era un lunes a la noche. Así que Camila la vaska, una chica con la que iba a viajar hasta el norte argentino, y yo decidimos que saldríamos el martes a la mañana, y que si en el trayecto del día se enteraba de cuando saldría el camión, nos avisara y lo encontrábamos por el camino.
El martes al mediodía salimos a la ruta. Un sol abrasador, de los que pican. Y para colmo, nuestra primera parte de la ruta era por caminos secundarios, apenas transitados y como mucho, solo de pueblo en pueblo. Sin embargo, las esperas nunca fueron más largas de 20 minutos, y viajando (incluso en un Mercedes Compressor 220, molaaaaaaaa!!!!) llegamos a Marcos Juarez, ciudad por la que pasa la ruta 9 que llega hasta la frontera boliviana. Ya estábamos ahí!
Desde ahí varios aventones, sin apenas esperar, hasta subirnos a un camión que nos llevaría por más de 6 horas hasta Santiago del Estero, parando cada hora a meterse una raya de coca. Pero todo bien. Y donde nos dejó, eran ya las 12 de la noche pasadas. Sabíamos que eran pasadas porque ya habíamos visto a 3 reyes magos medio borrachos paseando a las 12 encima de una camioneta. El calor era terrible, así que decidimos cenar algo e intentar seguir un poco más lejos. Hablamos con un camionero que justo encendía el motor, y aceptó llevarnos hasta Pozo Hondo, una estación de servicio un par de horas más al norte. Y ahí llegamos como a las 4.
Nos tumbamos a dormir sobre un trozo de cemento, ya que tanto calor no invitaba a montar la tienda de campaña. Y viendo las estrellas sobre nosotros, nos dormimos. Aunque sin quitar el ojo a la enooooorme tormenta eléctrica que llevábamos viendo todo el día unos 200 kms detrás nuestra. Además, los contactos con celular, nos indicaban que la tormenta era muy grosa, y que había tirado mucha agua por Buenos Aires, luego Rosario, luego Córdoba... en fin, que nos iba siguiendo.
A las 5.30, el viento más fresquito nos despertó: la tormenta estaba casi encima. Así que buscamos rápido un camión y lo encontramos, nos llevaría casi hasta Salta. Eso sí, la tormenta que nos agarró fue de las que no se olvidan. No se veía ni a 10 metros de distancia por la lluvia!!!!
Pero en vez de irnos por la ruta transitada, nos fuimos por una ruta de montaña, en la que tuvimos la suerte que a los 5 minutos nos paró un coche con unos franceses que iban a ... Purmamarca. Perfecto!!!! Además eran recopados. Y las vistas de esta carretera... me recordaban más al País Vasco que a Argentina.
Y allí en Purmamarca, comenzaba nuestra ruta por la Quebrada de Humahuaca, ese lindo lugar que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Y visitamos diferentes pueblos, con gran cultura indígena, con sus construcciones de adobe, sus trajes típicos, y sus increíbles paisajes y cerros multicolores.
Tilcara se denominaría el Mar del Plata del norte, el Salou de la montaña, no se... un lugar llenísisisisisimo de mochileros, y que por lo tanto está muy caro. Pero bueno, la verdad la pasamos bárbaro, y aparte de visitar el antiguo Pukará en el que vivían los originiarios habitantes del lugar, salimos de fiesta a la noche buscando una de las típicas Peñas, donde tocan música folclórica: chamamé, chacarera, ... buenísimo!!! y la fiesta siguió... hasta que la policía quiso. Eso sí, tanto turismo... me hizo que escuchara la cancion del Humahuaqueño unas 20 veces!!!
Y finalmente, llegamos a Iruya, donde era el encuentro de mochileros de Autostop, y donde nuevamente pude encontrarme con muchos amigos conocidos, y otros por conocer, donde nuevamente esas sensaciones de alegría infinita me quemaron por dentro, esa felicidad absoluta, en la que siempre hay alguien que te pasa un mate, una empanada, un vino, ... donde siempre hay alguien para charlar o para compartir el silencio, donde siempre hay una sonrisa, un fogón, una guitarra, ... y además el lugar, es espectacular, aunque solo pude estar un día, pero volveré, por supuesto.
Aupa Jotas.Zu gustura ikusteak pozten nau.Argentinan zaude berriro eta ez dakit ze plan duzun, baina Entreriosera joaten bazara han, Concordian, dago Jose, lagun min bat eta bere familia.Haiek oso oso hondo artuko zaituzte handik pasatzen bazara.
ResponderEliminarOndo izan.
Muxu handi bat Donostiatik.
Patxi Urrestarazu