Por la Malasia peninsular

Singapur no era muy divertido si uno no queria gastar dinero, asi que decidi cruzar el puente y volver a Malasia. Fue como volver a casa el hecho de volver a un pais en el que conoces las tradiciones, las comidas, el vocabulario, los precios... y asi llegue a Melacca, la que fuera importante capital del sultanato del mismo nombre, que controlaba el estrecho entre Malasia e Indonesia, lugar que si mirais al mapa era y es estrategico en el movimiento mercantil maritimo.

Lo primero que llama la atencion, son las construcciones; todas rojas y de un estilo que dicen corresponde a la colonia holandesa. Se puede ver incluso una replica del tipico molino holandes. Subo al promontorio que hay por ahi... y me encuentro con la escultura de un paisano mio; San Francisco Xabier; y es que parece que anduvo por aca predicando y le querian bastante, sobre todo cuando esta zona era bajo domino portugues.

Importante pero peque;a, decidi dejar la ciudad de Melacca, via un tren que habia oido que le apodaban "el tren de la jungla". Como suele pasar cuando le dan un nombre tan curioso a algo... no es tan bueno. Pero me arriesgue, ya que me venia bien, puesto que cruzaria la Malasia peninsular del suroeste, al noreste. Y para hacerlo mas a mi estilo, empece a viajar en uno a la ma;ana, y me baje en un pueblo para estar unas horas, y seguir a la tarde en el siguiente tren. Esas horas.... pues ya os imaginareis que era el centro de atencion del pueblo. Un hombre alto, medio barbudo, blanco (todos los ni;os me llamaban... "orang pute, orang pute", que significa "hombre blanco, hombre blanco"), y encima con la mochila... Y ademas, que se sentaba a comer en la calle, y pedia las cosas en malayo!!! si es que soy un crack!!! en fin, entre hombres que me miraban con curiosidad, mujeres que me sonreian y seguian su camino, y ni;os corriendo alrededor, volvi a la estacion para seguir mi camino.

El paisaje del viaje en si, tampoco fue tan espectacular como digo, y tucutucutu... llegue a Khota Bharu, cerca de la frontera con Thailandia en la zona este. El lugar... no era muy interesante, excepto si fuera un expero en ratas. Si, fue interesante el camino nocturno al mercado nocturno de comidas, por un callejon... en el que empece a oir moverse cosas y me percate que eran varias decenas de ratas. Esa noche, cene vegetariano (por si acaso). Aparte, lo unico interesante del lugar es su mercado (encantador de serpientes incluido) y su historia sobre la segunda guerra mundial, y es que fue por estas tierras por donde los japoneses desembarcaron e iniciaron el ataque a esta colonia inglesa.

Decidi seguir hacia el sur, en donde queria visitar varias islas: Perhentian, Tioman, ... pero estaban cerradas por monzon. Si, directamente, llega el mal tiempo y cierran el transporte a las islas. Asi que bueno, segui un poquito mas al sur y acabe en Kuala Terengganu, una ciudad super musulmana, sin cines, centros comerciales, bares, ni nada que se pueda parecer a ocio, donde el dia festivo es el viernes. Se podian conseguir algunas cervezas en los chinos (como siempre), pero realmente complicado por su gran islamismo. Ahi me encontre con mi amigo Nuri (y sus 7 gatos adoptados de la calle). Nuri, muy musulman, me ayudo a entender un poco la forma de vida de la region y sobre todo su religion, que aunque conocida jamas habia profundizado tanto.

Y tanto profundizamos que me ofrecio pasar con el y su familia el Eid al-Adha, fiesta del sacrificio en la religion musulmana, en la que se sacrifican vacas mirando a la meca, y de cada vaca un tercio se da al que la mata, un tercio para la familia, y otro tercio a la mezquita para repartir entre los necesitados. Obviamente, las mujeres no tocan a la vaca. Y para celebrar esto, fuimos a donde vivia su familia, que es en la costa oeste del pais. Y fuimos con su coche... una odisea.

Teniamos que bajar hasta Kuala Lumpur y de ahi subir hacia el norte hasta el pueblo de su familia. Empezo manejando el, pero incluso el reconocia que no era muy buen conductor, asi que tras parar a rezar en un lugar para oracion que hay en cualquier area de servicio, cambiamos y maneje yo, que ya tenia experiencia de manejar en el lado de los ingleses. Y seguimos hacia Kuala Lumpur, unos 500 kilometros... de los cuales, los 100 ultimos eran con un atasco descomunal en la direccion contraria, y es que todo el mundo de la capital iba a su casa familiar a pasar estos dias. Era el atasco mas grande que habia visto en mi vida... 80 kilometros con 4 carriles de coches parados, sin moverse.

Llegamos a Kuala Lumpur y empezamos nuestro viaje hasta el norte... hasta que nos toco un atasco. Nos imaginamos que seria igual que el que habiamos visto, asi que en cuanto vimos un area de servicio paramos a dormir, y seguimos viaje la ma;ana siguiente (tras rezar).

Como digo, llegamos a su casa. Son 9 hermanos, mas las mujeres mas los hijos... mas la madre. El padre no estaba porque iba a pasar esta festividad con su segunda mujer. Y menos mal que no estaban todos los hermanos porque aquello era una locura de gente, de comida, y de ni;os (todos con facebook, por cierto). El recibimiento fue super calido. El que sabia ingles me hizo sentirme como en casa, y con los que no... mi poco malayo y sonrisas y gestos hicieron lo siguiente.

Fue un dia intenso, comenzamos con el sacrificio de las vacas, para luego almorzar, ir de excursion, jugar con los ni;os, ver a uno de los sobrinos de Nuri haciendo diabluras con un yo-yo (se dedica a competir con el yo-yo... INCREIBLE!!!), jugar a Badminton, y sobre todo, comer. Acabamos el dia con el plato mas famoso de Malasia el Pollo Satay, que es una brocheta de pollo, empapada en un liquido super sabroso, para una vez asada huntarla en una salsa cuyo ingrediente basico es el cacahuete... mmmmm, pues eso, riquisimo!!!

Segui rumbo... rumbo a las monta;as, a las Cameron Highlands. Lo cual espero actualizar en breve... ya que las ultimas 4 semanas estuve sin conexion... por lo tanto, os mantendre entretenidos en Navidad.